Los Seattle Seahawks fueron multados con 100 mil dólares, esto tras consideración de la NFL por presuntamente no aplicar como se debía el protocolo de conmociones cuando su quarterback titular, Russell Wilson, recibió un fuerte golpe en el juego contra los Cardinals de Arizona del pasado 9 de noviembre.
El equipo de Seattle argumenta que en el partido que finalizó 22 a 16 a su favor, cuando sucedió el incidente, ellos tomaron las medidas estipuladas y necesarias, insistiendo que realizaron la revisión pertinente a Wilson antes de darle reingreso al terreno.
No obstante, las autoridades de la NFL tras una investigación, declararon que en el tercer cuarto, después de ocurrido el choque, al quarterback no se le realizó ningún tipo de análisis o examen previo a enviarlo de vuelta a la cancha, y que cuando sí se evaluó, fue con mucho tiempo transcurrido. Además, junto a la multa económica, los miembros del staff de los Seahawks, deben asistir nuevamente a una capacitación impartida por profesionales en el tema.
Esto confirma nuevamente que la entidad que alberga uno de los deportes más populares del mundo, se toma muy en serio el tema de las conmociones o incluso el riesgo de ellas. En especial luego de las múltiples críticas que se le han realizado al deporte y a la NFL debido a la gran cantidad de lesiones que han sucedido en esta temporada.
Además se encuentran bajo críticas por la intensidad de muchos de sus juegos que han derivado, más allá de en terribles lesiones, en un juego excedido en hostilidad, por ejemplo, en la Semana 13 en juego entre los Bengals y Steelers, Joe Mixon y Ryan Shazier, de dichos equipos respectivamente, se marcharon con fuertes lesiones, pero también la disputa estuvo marcada por una serie de tacleadas ilegales.
Tan solo en la recién finalizada Semana 15 de competencia, Fox Sports contabilizó que el martes 19 de diciembre se anunciaron 12 nuevos casos de jugadores con algún tipo de lesión o problema físico. Por lo tanto, la NFL al encontrarse bajo la lupa, se mantiene en búsqueda de soluciones ante estos incovenientes, siendo uno de los primeros sancionados los Seahawks.