La final del Apertura 2017 en la que Pérez Zeledón se coronó campeón dejó sanciones disciplinarias y económicas tanto para los generaleños como para Herediano, aunque el Rosabal Cordero no fue vetado a pesar de que hubo invasión al final del partido.
El Tribunal Disciplinario de la Federación Costarricense de Fútbol dio a conocer los castigos este miércoles.
El Club Sport Herediano solamente recibió una multa de 200 mil colones por la invasión de aficionados heredianos ual final del partido y por poner en peligro la integridad física del cuarteto arbitral, que iban con la clara intención de agredir a los silbateros.
«Sin embargo, en virtud de la rápida acción de la seguridad privada, el Tribunal Disciplinario no consideró necesaria la sanción de veto de estadio», dice el comunicado.
El volante del campeón nacional, Jeikel Venegas, fue expulsado al minuto 83 del partido que se disputó el pasado 23 de diciembre en la casa florense, y fue sancionado con tres partidos y deberá pagar una multa de 175 mil colones «por utilizar lenguaje ofensivo en contra de un oficial del partido, de conformidad con el artículo 36 inciso 1 del Reglamento Disciplinario del Fútbol de la Primera División».
También ambos equipos de Pérez Zeledón y Herediano fueron multados con ₡200 mil cada uno al ser la tercera vez durante el campeonato que reciben cinco o más sanciones disciplinarias por parte del cuerpo arbitral, de acuerdo con el artículo 39 del Reglamento Disciplinario del Fútbol de la Primera División, según cita el comunicado de la Fedefútbol.