A pocos días de que se lleven a cabo los Juegos Olímpicos de Invierno, en el Comité Olímpico Internacional (COI) se muestran atentos a una posible amenaza en el control antidoping y cómo se desenvuelva la relación entre las dos Coreas.
Con el motivo inicial de afinar temas de instalaciones y sostener algunas reuniones ejecutivas, el presidente del COI, Thomas Bach, viajó a PyeongChang, sede de las justas invernales de este 2018. Sin embargo, ahora también debe prestar especial atención a ciertos aspectos que han surgido en los últimos días.
Por ejemplo, la agencia de noticias EP, en información difundida por el Diario As, da a conocer que la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) se encuentra en medio de una investigación debido al riesgo sobre los frascos donde se recogen las muestras de orina y sangre, ya que, se sospecha que al ser congelados, pueden abrirse de forma manual y por ende manipulados.
En el COI dicen estar muy preocupados por este tema, pero de lo que no se han referido es en el tema de la cancelación de un evento entre La República Popular Democrática de Corea (RPDC) y Corea del Sur.
Se llegó a un acuerdo para que ambas naciones desfilen juntas en la inauguración del 9 de febrero, e incluso participen como una sola en el hockey femenino. No obstante, una actividad previa con artistas de ambas Coreas se canceló a raíz del enojo de la RPDC con un sector de la prensa surcoreana, a quienes acusan de intentar truncar los intentos de paz, lo que podría suponer algún tipo de nueva fricción.
Pero las polémicas no acaban allí, la agencia Reuters fue vetada de cubrir la apertura del evento olímpico, en consecuencia de difundir unas imágenes sin permiso del ensayo del encendido de la llama. Ahora solo resta esperar cómo manejan estos y otros temas desde el ente organizador, y cómo transcurrirá Pyeongchang 2018.